Bonilla se junta con los que saben -Construye madurez política -Violencia fuera de control -Deuda genera ingobernabilidad
MARCO Bonilla Mendoza el alcalde electo de la capital, está tejiendo muy fino en todos los sectores que inciden en la armonía y desarrollo sustentable del Municipio de Chihuahua.
A tres meses y días de asumir la alcaldía, Bonilla ha demostrado humildad para escuchar, con especial atención a quienes saben y conocen de servicios, urbanismo, desarrollo económico, social y seguridad pública.
Ayer acudió al domicilio en Delicias del ex alcalde priísta, José Reyes Baeza Terrazas, para recibir “la experiencia y consejos”, escribiría en redes sociales digitales, el presidente municipal electo.
Bonilla ha sostenido reuniones analíticas también con los exalcaldes Juan Blanco Saldívar, quien es parte de su equipo y compañero de partido y con Álvaro Madero Muñoz, quien políticamente hablando anda entre melón y sandía.
La reunión con Reyes Baeza, desde luego que atrajo una atención mayor, pues no sólo se trata de un ex alcalde, sino de un ex gobernador, lo que seguramente le da un plus, no sólo por su conocimiento de la capital, sino en una visión estatal.
El alcalde electo construye buena brecha y se acerca a los que saben sin distingos de colores partidistas, en busca de desarrollar un buen gobierno, lo que demuestra que, pese a su juventud, está en camino de plena madurez política, lo que la sociedad chihuahuense le reconoce en este tramo, aunque significa también elevar las expectativas sobre su persona.
EL PRESENTE mes de julio seguramente va quedar estampado en la estadística de inseguridad, como el más violento de año y seguramente de muchos otros.
De manera oficial hasta el día siete, se habían registrado y reconocido por parte de la Fiscalía General del Estado, 58 crímenes de alto impacto, entre ellos tres mujeres y dos conductores de la plataforma DiDi.
El Fiscal César Augusto Peniche, descarta que los asesinatos estén relacionados con el final de la administración estatal, bajo la creencia de que ya no hay combate al crimen organizado en una especie de ingobernabilidad.
Es muy difícil comprobar que la inacción oficial sea la causa, pero la realidad demuestra que en promedio en la primera semana del mes, fueron asesinados por día 7.25 por ciento de personas, claro, sin dejar de que las personas no se pueden fragmentar.
La cifra es tan grande como preocupante; la versión oficial sólo explica lo de siempre: pelea por la plaza, reacomodos o arribo de nuevos grupos del crimen organizado y bla bla bla.
Eso ya no convence ni tranquiliza a nadie, menos cuando Chihuahua ocupa otraaa veeez, el segundo lugar en este tipo de asesinatos. Y nada pasa.
Las mesas interinstitucionales de Seguridad Pública, estarían por lo tanto reprobadas si se sometieran a una evaluación. Deoquis la insistencia de Corral para que regresaran los de federales.
LA DEUDA pública del estado de Chihuahua es todo un entramado tenebroso, en donde los autores involucrados tienen cifras diferentes, o lo peor carecen de ellas, desde la Secretaría de Hacienda, el Congreso del Estado y hasta el equipo de o transición de la gobernadora electa, María Eugenia Campos Galván.
La Secretaría de Hacienda federal, ubica a Chihuahua como las cinco entidades con más deuda, muy al parejo con Nuevo León, Coahuila, Durango, desde luego que, en proporción la CDMX.
Lo lamentable de la adeuda de Chihuahua, no es en sí mismo la cantidad, sino que no ha destinado recursos para infraestructura, como lo establece la Ley que regula la materia.
El problema de fondo es que los recursos que en general aportan los chihuahuense, se está destinado a pagar intereses; por lo menos en este quinquenio, no se regresa a la sociedad a través de las obras y los servicios.
El informe oficial ubica a Chihuahua con una deuda de 47 mil millones de pesos, dos mil millones menos de los que dejó César Duarte, lo que supondría un avance, pero Hacienda federal se refiere a “la deuda general”.
Es decir, no se contabiliza la deuda a proveedores que supera los 10 mil millones de pesos, el adeudo a fideicomisos privados, tampoco al Fideicomiso Carretero, el de puentes internacionales y los que se debe a los organismos autónomos (en Chihuahua son cinco), que dependen de la nómina estatal. Más los que sin duda, luego aparecerán.
Así está la crisis financiera en la entidad, la suma de todo nos daría una idea más clara del monto total del adeudo, lo que no será poca cosa y por supuesto que le urge conocer al nuevo Gobierno del Estado.
Otra vez Chihuahua en ruinas; ya llevamos casi 11 años en las mismas y nada sucede. Todo pasa como los imparables cronos.