*El pequeño charlatán Samuelito
Con el aplomo de un charlatán formado en el cinismo desde la cuna, Samuel García hizo circular, uno de diciembre a las diez de la noche, un video donde anunció que Javier Navarro quedaría como gobernador interino de Nuevo León sin ningún impedimento legal y él reanudaría su precampaña porque “veníamos a la alza con un crecimiento gigante”. A las once y media la Corte aclaró que Luis Enrique Orozco, nombrado por el Congreso, será el gobernador interino y la licencia de García correría a partir del momento en que Orozco asumiera el cargo. Trágame tierra, el innovador y decidido candidato recula a la una de la madrugada, dos de diciembre, cuando Navarro informa que García reasumirá el cargo de gobernador y a las dos con cuarenta y cinco minutos, emite un mensaje en su cuenta de X confirmando la declaración de Navarro: “Nuevo León, ya comuniqué al gabinete que reasumí legal y formalmente funciones, los he convocado el día de mañana a primera hora para seguir construyendo el nuevo Nuevo León”.
En sólo tres horas, el nuevo y eficiente político, el que iba creciendo gigantescamente y ya estaba en segundo lugar, el que prometió estrujar la política mexicana cambió abruptamente de parecer y, sin dejarse ver, aceptó la derrota más humillante que se recuerde en la vida pública del país a esos niveles. En ese lapso de tres horas quedó exhibido como político de faramalla, formado en la trivialidad de las redes sociales, insustancial, un farsante sin palabra, fanfarrón irresponsable carente de oficio, vendido al populismo. Quiso engañar al país ofreciéndose como “lo nuevo”, el que haría “posible lo imposible” y terminó de patético cuenta cuentos digital que no llega ni a merolico. Ahí está su samuelito, hecho pedazos, batido en su propia indignidad.
Uno pensaría que ahí terminó el bochornoso y ridículo episodio, pero ésta mañana el presidente del Congreso, Mauro Guerra Villarreal, informó que “La licencia de Samuel García para separarse del cargo de gobernador sigue vigente”, agregando nuevos episodios a la telenovela. Por lo visto durante la confrontación, otra vez será necesaria la intervención de la Corte para garantizar la gobernabilidad del estado, pues de la declaración que hizo el presidente del Congreso se infiere que en estos momentos Nuevo León tiene dos gobernadores, el interino y el que reasumió el cargo. Patético.
¿Puede Samuel García quedarse sin ser candidato a la presidencia y sin la gubernatura? Por la declaración del diputado Guerra se infiere que la posibilidad quedó abierta, si tiene vigente la licencia no existe impedimento legal para ser candidato. Lo que no sabemos es si Dante quiera levantar sus despojos, ni existe certeza de que el Congreso tenga razón sobre el estatus legal de la licencia. Lo que si está claro es que otra vez irán al litigio, su gubernatura quedará firme hasta en tanto la Corte se pronuncie y lo haga en su favor.
Su complicidad con el populismo lo desgastó hasta reducirlo al ridículo antes de iniciar la campaña, sólo 24 horas antes del desenlace todavía López Obrador hablaba bien de él, aunque Mario Delgado anunció la ruptura poco después. Sus anhelos y proyectos personales quedaron despedazados pero intacta su dignidad, no puede dañar lo que no tiene. Se visualizó como líder nacional regresando triunfante al estado que gobierna (sabía que nunca ganaría ni tampoco llegaría al segundo lugar), donde su esposa sería senadora quedando encaminada para sucederlo en 2027. Nada será posible hoy, terminó convertido en despojo político, forzado a luchar para sostener su gobierno, si concluye el sexenio le irá bien.
Mientras sigue fanfarroneando con ser imparable, verá que otro ocupa su lugar y soportará el “te lo dije, compadre, no era tiempo”, de Luis Donaldo Colosio, uno de los ganadores indirectos, su madurez llamando a la cordura lo enaltece. Otro ganador es Marcelo Ebrard, Morena lo cortejó hasta el límite para evitar que aceptase la candidatura de Movimiento Ciudadano y cuando postularon a Samuel García lo maltrataron en público, desmintiendo supuestos acuerdos con Claudia Sheinbaum. Hoy las negociaciones entre Marcelo y Morena están en curso, presumiblemente pidió 16 diputaciones federales, ocho senadurías, otros espacios de elección y cargos en el partido.
Con Samuel defenestrado tendrán que acceder a sus demandas, pues renace la posibilidad de que acepte la candidatura por MC. Aunque cobra caro, a veces el diablo echa una mano cuando menos lo esperas, Marcelo quedó estratégicamente situado; o le cumplen en Morena o corre a MC, donde negociaría los espacios negados en su todavía partido. Con otra, ¿Y si acepta ir de candidato?. Ésta pregunta es intrascendente, muy pronto sabremos y en lo personal dudo que acepte, a menos que rechacen sus propuestas, es un político cuya condición de indeciso y timorato está muy acreditada. En la hipótesis de que no acepte ¿A quien postularía MC? ¿Se apunta el propio Dante en las boletas?, ¿Van por la senadora a la que ningunearon para imponer a Samuel?. Híjole, la caída del fosfo arrastró a Dante.
El escándalo García dejó varias enseñanzas: 1) Hasta en tiempos de populistas y falsos mesías autoritarios la política vomita a los cínicos improvisados, respeta el cinismo pero no la improvisación. 2) Por más poder que acumule un presidente, tiene límites si el Poder Judicial se mantiene autónomo, con Samuel caído no sabe cómo dividir a la oposición. 3) Las complicidades tejidas en la oscuridad salen a la luz pública, a veces más temprano que tarde, Morena lamenta los hechos y la oposición los aplaude. 4) Es imposible inflar proyectos a base de memes y spotazos, hay que presentar opciones con un mínimo de sustancia. 5) Las peores prácticas políticas encuentran un dique en la Constitución. Y seis, nadie puede liberar gases arriba del trasero, Samuel aprendió el escatológico dicho de la peor forma. Queda el apunte, para quienes piensan que la luna es de queso y sobre ella trotan lindos conejitos.
Rompeolas
A Vicente Fox le cancelaron su cuenta de X por llamar “dama de compañía” a Mariana Rodríguez, esposa de Samuel García. En la misma plataforma ella respondió majadera: “con la fosfo fosfo nadie se mete, perro”. ¿Las consecuencias por llamar perro a un expresidente? Ninguna. Artemio Iglesias decía que la política todo da, pero también todo cobra. Muy pronto se la están cobrando a la pareja, Fox fue de los pocos valientes que los enfrentó directamente, supongo que hoy disfruta su caída.
………………
El berrinche de Duarte queda para el lunes, adelantando que la victimización le sienta mal.