El actor y comediante Tim Allen ha captado la atención de miles al compartir públicamente su compromiso de leer la Biblia de principio a fin. Allen, conocido por su escepticismo en el pasado, anunció que tras casi un año de dedicación logró terminar el Antiguo Testamento y ahora avanza con entusiasmo en el Nuevo Testamento.
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Allen describió la experiencia de leer la Biblia como “humillante y abrumadora”. “Después de casi un año terminé todo el Antiguo Testamento y la experiencia de leer, con enfoque y sin distracciones, ha sido un tesoro”, compartió el actor en sus redes sociales.
El comediante, que fue criado como episcopaliano pero atravesó una etapa de duda tras la muerte de su padre, afirmó que nunca antes había leído la Biblia completa. “Nunca tomé el tiempo en todos mis años para realmente leer la Biblia”, confesó Allen, quien ahora se muestra sorprendido por la profundidad y riqueza del texto.
Actualmente, Allen está leyendo la carta de Pablo a los Romanos y expresó su asombro: “¡Estoy asombrado en solo siete páginas!”. El actor reconoció que, al dejar de lado sus prejuicios, las palabras y el significado fluyen y se convierten en un verdadero regalo espiritual.
La transformación de Allen no ha pasado desapercibida. Muchos seguidores han elogiado su apertura y sinceridad, animándolo a continuar su viaje de fe. Allen ha compartido imágenes de su Biblia de Jerusalén, visiblemente usada y llena de marcadores, como símbolo de su dedicación.
Su testimonio se suma al de otros comediantes y figuras públicas que han mostrado un renovado interés por la fe cristiana. Allen mismo ha reconocido que su visión de Dios ha cambiado, pasando de la duda a ver a Dios como “El Constructor”, alguien a quien consulta para encontrar propósito y dirección en su vida.
El ejemplo de Tim Allen es un recordatorio del poder transformador de la Palabra de Dios. La Biblia enseña que la fe viene por el oír, y el oír por la Palabra de Dios (Romanos 10:17). Leer la Escritura con humildad y apertura permite que Dios hable y transforme corazones, sin importar el pasado o las dudas previas.
El testimonio público de figuras como Allen puede animar a otros a buscar a Dios y descubrir el tesoro que es Su Palabra, confiando en que solo el Espíritu Santo hace la obra transformadora en cada corazón.
La fe cristiana invita a todos a un encuentro personal con Dios a través de la Biblia. La historia de este actor muestra que nunca es tarde para buscar la verdad, y que la Palabra de Dios sigue viva, es poderosa y capaz de cambiar a quienes se acercan a ella con sinceridad.
