Ante el riesgo de no volver a caminar, Diana Bracho, de 79 años, tuvo que someterse a una operación de columna y cervicales a inicios de año
Jacqueline Ponce León | Agencia Reforma
CDMX.- Ante el riesgo de no volver a caminar, Diana Bracho, de 79 años, tuvo que someterse a una operación de columna y cervicales a inicios de año.
Y para la actriz, con más de 50 años de trayectoria artística en cine, televisión y teatro, la actuación ha sido su mejor terapia.
“Para el diagnóstico, el doctor se dio cuenta de que era algo que tenía desde hace mucho tiempo y yo no me había dado cuenta. Nunca me dolió el cuello ni las cervicales. Cuando el doctor me dijo: ‘Usted tiene un problema de cervicales y es operación sí o sí. Si no se opera, se va a quedar inválida’. Le dije: ‘No, ¿cuándo me opera, doctor? Ya mañana'”, reveló en entrevista.Recordada por sus villanías telenovelescas en las pieles de Leonora Navarro de Larios en Cuna de Lobos o la tía odiada Evangelina Vizcaíno en Cadenas de Amargura, la actriz comparte que mantuvo actitud positiva antes y después de su cirugía.
“Es una operación muy riesgosa y difícil, pero salió muy bien. Estoy muy bien en manos de los mejores médicos. Me estoy recuperando poco a poco, es una recuperación muy larga”, asegura.Como la actuación ha sido su mejor aliciente, Bracho, quien en agosto de 2023 se operó de cataratas, aprovechó este año para volver a los escenarios al lado de Juan Manuel Bernal y en mayo pasado escenificó en el Teatro Milán el montaje Madres e Hijos.
“Durante la recuperación hice esta obra fantástica, que fue un proyecto hermosísimo y maravilloso donde estaba en escena toda la obra, pero que fue un proyecto que tocó muchos corazones. Yo digo: ‘Si hago un trabajo y logro tocar a tres personas, a tres corazones, para mí ya valió la pena’.”Juan Manuel es un actor maravilloso, Eugenio (Rubio) fantástico actor, con dos niños divinos (Luca Guerra y Antuán Trejo) y con un guion de una historia de mi gran amigo, Terrence McNally, gran escritor del siglo 20 en Estados Unidos”.La trama de la obra de teatro abordaba la complejidad de la maternidad, el perdón y todo lo que sucede cuando no se les hace frente a los duelos. Bracho interpretaba a Betty, una mujer que cimentó una armadura para seguir con su vida y ser una mujer calculadora.”Desgraciadamente, Terrence McNally murió antes de que hiciéramos la obra, pero me hablaba por teléfono. Decía: ‘Estoy feliz de que vas a hacer Katherine, vas a hacer Katherine una cosa maravillosa’.”Aquí no le pusimos Katherine, le pusimos Betty. Se murió Terrence, fue la primera víctima del Covid en Nueva York, fue un gran escritor y con él hice Master Class, una obra sobre Maria Callas”, recapitula la ganadora de dos Premios Ariel por Mejor Coactuación Femenina en El Castillo de la Pureza y El Infierno de Todos tan Temido en 1973 y 1980, respectivamente.La heredera de la dinastía Bracho sigue labrando su legado al formar parte de Regalo de Amor, telenovela que estrenará en 2025 Las Estrellas, en la que dará vida a Catalina, una mujer y abuela con buenos sentimientos e ideas tradicionales sobre cómo debe ser una familia.”Antes de hacer la obra de teatro y de todo esto tomaba terapias todos los días. Ahorita son terapias cuatro días a la semana, me despierto y luego luego hago mis ejercicios. Es tener mucha disciplina, y sobre todo, muchas ganas de estar bien y salir adelante”, comenta Bracho, quien brilló como directora de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC).Como consecuencia de su operación, Bracho suele caminar despacio y, generalmente, suele ir acompañada del brazo de alguien. Además, no puede estar de pie durante tiempos prolongados.Aunque el 12 de diciembre cumplirá 80 años, la autora del libro “Pronóstico Reservado” celebra todos los días desde que se levanta de su cama y ve los árboles que se asoman por su ventana para recargarse de energía y continuar con más proyectos profesionales.Si bien le encanta escribir, la estrella, quien heredó el talento de su papá, el actor y director mexicano Julio Bracho y de su mamá, la actriz y bailarina Diana Bordes Mangel, tiene en puerta más trabajo.”Escribir es un proyecto muy demandante, realmente ahorita no he tenido tiempo entre la recuperación y ahorita el trabajo y la obra de teatro. Voy a hacer una película divina acabando la telenovela, un peliculón, será con un actor francés y queremos a Jean Reno. Será bilingüe, yo hablo en francés con él y en español con los demás”, adelanta Bracho, reservándose los detalles.
