Bienestar insensible / Huelga de hambre a la vista / Maru ¿Te escucha? / Otros datos de la gobernadora
LOS TRABAJADORES despedidos de la delegación estatal de Bienestar, se colocarán en ayuno permanente, por lo menos hasta que sean atendidos de manera satisfactoria en este caso por el superdelegado, Juan Carlos Loera de la Rosa.
Y es que, ya están en su segunda semana desde que fueron despedidos a través de mensaje de texto o llamada telefónica y ni siquiera saben el por qué de su despido.
Se trata de 60 trabajadores a quienes los mandaron literalmente a la calle, pero sin que existiera motivo, lo más delicado del caso, sin que fueran indemnizados como mandata la Ley Federal del Trabajo.
El lunes de la semana pasada bloquearon las oficinas de Bienestar y no fueron atendidos ni recibidos por alguna autoridad; al día siguiente bloquearon por varias horas la avenida Ocampo, una de las de mayor tránsito en la capital y siguen sin respuesta.
La única explicación que se les dio, es que se trata de una orden directa de la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel Díaz, lo que suena demasiado hueco, sólo basta imaginar que entre 50 mil servidores públicos del país, se seleccionaron a 60 de la ciudad de Chihuahua, sería una locura.
Por lo pronto y si no hay quien los reciba, estarán en huelga de hambre, el tiempo que sea necesario hasta que se les resuelva el asunto.
En demanda inicial de los trabajadores hay dos opciones que ha externado. La primera es que se le reinstale y la segunda si se presenta la primera, que se les indemnice conforme a derecho.
La medida anunciada por los servidores públicos es extrema, como inhumano resulta el despido vía telefónico, sin razón aparente.
Muestra además, el lado inhumado de esta secretaria y del propio Gobierno Federal, en el que cada mañana, se dice que se trata de un gobierno humanista, desde luego en el discurso.
Desde el Congreso del Estado, se aprobó ayer un punto de acuerdo para que el delegado de Bienestar Juan Carlos Loera de la Rosa, atienda la problemática, aunque seguramente quedará como llamado a misa.
Ni en este problema ni en otros hay sensibilidad y mucho menos voluntad, por parte del Gobierno Federal para generar una solución.
EL PRÓXIMO lunes inician las transmisiones del programa semanal informativo de la gobernadora María Eugenia Campos Galván, a partir de las 7:30 de la mañana y con duración de media hora.
El programa tendrá dos cápsulas informativas (pregrabadas), una entrevista y el espacio “Te Escucha”, en donde se recibirán mensajes de voz y texto a través del WhatsApp y tendrán una respuesta inmediata por parte de la mandataria.
La conducción estará a cargo de la propia gobernadora, pero semanalmente la acompañará un periodista o conductor de radio y/o televisión.
El programa será trasmitido vía redes sociales del Gobierno del Estado y las propias personales de Maru Campos.
Inicialmente se había dicho que el programa se trasmitiría también por televisión abierta y por la radio, pero al parecer los elevados costos cancelaron por ahora esta la posibilidad.
OJALÁ y que la gobernadora Campos Galván no tenga otros datos en materia de inseguridad como ya saben quién.
Ayer dijo que la estrategia en contra de la inseguridad no tendrá cambios, ya que está funcionado de manera adecuado, incluso con resultados a la baja que son tangibles y con estadística en mano.
Bueno, el caso es que para los políticos que están en el poder todo está bien y marcha de maravilla y hablamos de todos los niveles de gobierno. Qué necesidad hay faltar a la verdad e interpretar la estadística a modo, ninguna pero así se las gasta.
López Obrador por desgracia va a cerrar con el récord histórico de 170 mil asesinatos de alto impacto, ojalá y no sean más, en donde el estado de Chihuahua aporta en promedio un 13 por cierto.
Eso también es estadística, cada mes que transcurre del año los medios dan cuenta de que el mes transcurrido ha sido el más violento y así consecutivamente.
Vamos en el onceavo día de julio y ya van 38 crímenes de alto impacto, 12 en Ciudad Juárez; 10 en la capital y el resto en 55 municipios.
No pinta bien, para el deseo colectivo; entonces para qué maquillar. Si los problemas endémicos como este no se aceptan, no hay forma de solución.
