Y se puede poner peor…
Peje el grito y promulga la reforma judicial…
Montón de gritos cancelados por inseguridad…
Municipios incendiados por inseguridad nacional…
Coyame un comandante y un policía nada más…
Donald Trump asegura que odia a Taylor Swift…
El Peje Presidente dio su ultimo grito, de apoteótico se puede calificar el evento, hay quienes cantan hasta loas, asegurando que AMLO es el mejor presidente de la historia del mundo, ver la realidad y escuchar o leer un comentario de ese tamaño, hace imaginar a un Nerón cantando, bailando y tocando el arpa, mientras Roma se incendiaba y junto a él un montón de locos cantando las grandezas del señor y festejando la quemazón.
En tiempos de Calígula, (Cayo Julio César Augusto Germánico), el más brutal, lunático y depravado de los tiranos romanos (y vaya que hay tres o cuatro que de plano fueron brutales), él decía, porque lo creía como si fuera una verdad absoluta que él era la reencarnación de Venus y llegaba al extremo de tener periodos en donde se ponía en estado catatónico y empezaba a balbucear y a pegar de gritos, pues supuestamente estaba discutiendo con los “otros dioses” a quien amenazaba con destruirlos o a quienes les dedicaba palabras de amor y sensualidad, pues decía estar teniendo una relación con uno o una de ellos o con varios al mismo tiempo.
Durante su reinado, quienes lo rodeaban le pasaban todas sus locuras, los senadores llegaban al extremo de acudir a sus invitaciones, en donde Caligula ordenaba a las esposas y las hijas o hijos de sus invitados que sostuvieron relaciones sexuales con él, “pues esta bendiciendo a ese hogar” y los senadores salían agradeciendo “la bendición” del emperador.
Y de igual forma hay dos que tres ejemplos más en la historia de lo que es la locura, el miedo o la estupidez colectiva, de creerle a un dictador su locura, aceptarle sus vicios y hasta justificar sus crímenes, como durante mucho tiempo les pasa mis amigos priistas durante la “dictadura perfecta” o a los amigos panistas, que todavía se desgañitan defendiendo a Fox y Calderón.
Es por eso que algunos de los más grandes pensadores de la historia señalaron que esa es la parte del gran riesgo de la democracia, en donde la mayoría puede estar equivocada, engañada, sumida en una histeria colectiva y que eso lleve a una nación a su perdición.
Los “Amlovers”, “Pejezombis”, cantan loas y le creen al Tlatoani de la Macuspana, que el servicio de salud en México es el mejor del mundo, que la corrupción ya se terminó, que no hay huachicoleo, que Dos Bocas produce gasolina, que el AIFA es el mejor aeropuerto el mundo, que el Tren Maya es una de las maravillas del mundo moderno y que la inseguridad ya solo es un mito y que por ende, “ya somos otro país”.
Pero aunque la realidad reviente cada una de esas mentiras repetidas todos los días desde el púlpito de las mañaneras, la mayoría sigue aprobando a la actual dictadura disfrazada de “gobierno liberal” y mientras eso siga pasando, la oposición puede desgañitarse, pueden arrancarse los cabellos a dos manos y darse de topes en la pared y de nada va a servir, pues el colmo es que aunque las mentiras son evidentes, la oposición representa todo lo que la mayoría no quiere que regrese y eso ya es decir mucho.
Total, el Peje dio su ultimo grito de independencia, momentos antes dio a conocer que había mandado publicar en el Periódico Oficial de la Federación la Reforma Judicial y en días más la cámara de diputados ira aprobando una a una las reformas que él mandó, “como legado para el país, como las columnas para sostener el segundo piso de la cuarta transformación”.
Es decir, la oposición está jodida, la mayoría prefiere creer mentiras, antes que verlos como una opción.
Consulta Mitosfky que dirige Roy Campos, mes a mes durante todo el sexenio ha presentado la evaluación popular al Peje, el promedio es que AMLO ha mantenido un 61.2% de aprobación, es decir, nunca ha perdido el apoyo de la mayoría.
La desaprobación general es del 38.6%; el 39.2% de los ciudadanos aseguran que el país va mejorando, es decir, son más lo que creen eso que los que afirman que el país empeora, pues esos solo representan el 27.5%.
El 32.2% dice que el país está igual, que no ha empeorado, así que el 71.4% de los ciudadanos en México, creen o que vivimos mejor o que no hay nada de que preocuparnos, pues las cosas están igual que siempre.
Las principales preocupaciones de los ciudadanos al cierre de esta administración son: Inseguridad: 54.2%; Economía: 18.9%; Salud: 14.9%; Es decir, casi la mitad de los ciudadanos (45.8%) dicen que la cosa está bien. Más del 80% no están preocupados por la economía o el costo de la vida y el 85.1% de los ciudadanos no ven con preocupación el sistema de salud del país.
El 61% de los hombres y de las mujeres aprueban al presidente. El 62% de los jóvenes de 18 a 29 años, lo aprueban; el 61% de los de 30 a 49 años, también lo aprueban y el 60% de los adultos de 50 años o más también lo aprueban, es decir en todos los sectores de edad, lo aprueban.
La aprobación por nivel educativo, señala que los que tienen estudios de preparatoria o menos, el 65% lo aprueba. Y de los que tienen estudios universitarios o más, el 48% lo aprueba, así que no se trata de una aprobación de ignorantes o jovenes, en todos los sectores está bien evaluado.
En la aprobación por región, la cosa está así: Noroeste: 66%; Noreste: 54%; Occidente-Bajío: 63%; Centro: 67% y en el Sureste y la Península, una aprobación del 55%, así que ya no hay nada de que el norte está en su contra y que solo el sur y el centro lo aprobaban.
La oposición debe de preocuparse mucho más, pues al revisar la llamada “Aprobación por Identidad Partidista”, resulta que el 97% de3 los Morenista lo aprueban, como sería muy normal, pero el 12% de los panistas también le dan calificación aprobatoria, como el 19% de los priistas y el 43% de los que dicen estar identificados con Movimiento Ciudadano y el 63% de los que dicen identificarse con otros partidos, también le dan calificación aprobatoria.
El análisis de la aprobación por ocupación, es el siguiente: Campesinos: 69%, Empleados: 69%, Amas de casa: 68%, Informales: 68%, Jubilados: 63%, Estudiantes: 58%, Comerciantes: 57%, Profesores: 54%, Servidores Públicos: 51%, Desempleados: 49%, Empresarios: 44% y Profesionistas: 44%.
Los estados donde tiene una mayor aprobación: Oaxaca: 80%, Tabasco: 77%, Tamaulipas: 73%, Chiapas: 73% y Nayarit: 72%.
Los estados con menor aprobación: Aguascalientes: 43%, Querétaro: 46%, Jalisco: 44%, Nuevo León: 51% y San Luis Potosí: 51. Y en solo en dos de ellos, son mayoría los que los desaprueban.
Así que mientras la oposición no entienda “esa otra realidad” de la mayoría, no tendrán ruta de viaje, pues la democracia tiene como principal cimiento, “que la mayoría manda”, ojalá y que pronto lo entiendan…
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…En diversos municipios de seis estados del país Nuevo León, Durango, Michoacán, Chiapas, Sinaloa y nuestro Chihuahua, suspendieron la fiesta del “Grito de Independencia”, por la inseguridad, por la posibilidad de un brote de violencia extrema. Peo bueno, esa es “otra realidad” que no ve la mayoría…
…Los municipios de Chihuahua en donde se viven un verdadero “estado de guerra”, son el resultado de dos cosas muy claras de definir, la primera de ellas, que la federación abandonó la lucha contra el crimen, repartieron abrazos y no balazos y por eso hoy de nuevo estamos en “una guerra del narco” y dos, en el caso de nuestra entidad, los cinco años del “corralato”, nos están pasando una factura muy cara de pagar…
…Ejemplo de lo mal que andan las cosas, en Coyame nos dan a conocer que solo hay dos policías, uno es el comandante o director de Seguridad Pública Municipal y el otro es su hijo, que no ha renunciado para no dejar solo a su apá. Así que el municipio parece tierra sin ley, pues además de los problemas con los grupos del crimen organizado que se pelean el control de la plaza, para el trafico, no hay ni quien ponga orden en las calles en los temas del día a día…
…En un tema internacional, sumamente interesante resulta observar las estadísticas “pre-electorales”, con lo que pasó después del debate presidencial entre Trump y Kamala, donde la candidata del Partido Demócrata se puso a la cabeza de las preferencias, pero lo que llama poderosamente la atención de los analistas, es que tras el anuncio de Taylor Swift de que ella apoyaba a la Demócrata, las encuestas se movieron drásticamente, pues aseguraron que casi 30 millones de seguidores de la cantante, pudieran cambiar su intención de voto y más cuando el propio Trump aseguró en una entrevista que él “odiaba a la cantante”. Tema harto interesante es analizar al votante promedio de los Estados Unidos y la posibilidad de que la cantante más influyente del mundo en este momento pudiera ser definitiva en ese proceso electoral. Ojo al tema…