Ojinaga.- Con la reapertura de la economía en México, los pequeños negocios se adaptan a los nuevos estándares sanitarios. Por los altos costos de operación y los bajos ingresos, algunos no lograron reabrir sus puertas y sus cortinas permanecen abajo con anuncios de renta y traspaso.
Los negocios que sí lograron sobrevivir al inicio de la pandemia ahora tienen el reto de volver a generar ventas.
Algunos apuestan por los descuentos en sus productos y simulan la antigua normalidad para dar confianza, otros deciden acatar todas las reglas sanitarias para cuidarse a ellos y a sus clientes.
Los más afectados son los pequeños restaurantes y negocios conocidos como changarros que no recibieron apoyo gubernamental ni forman parte de alguna cadena que los soporte.
En el sector de los restaurantes, los efectos del coronavirus han obligado al cierre de 10 locales en todo Ojinaga, mencionan los que aun permanecen.